Rincón de los sueños

Hablo con el alma tan abierta que cada uno de mis puntos de sutura va cerrando y algunas cicatrices ya no necesitan tiritas ni betadine para curar. Ahora y después de mucho vivido se que he crecido tanto a nivel personal que me siento orgullosa de ello y siento desde hace poco que voy por el camino correcto. Llegar hasta aquí me ha costado he tenido que superar miedos, dificultades, falsas amistades, traumas y malos momentos a nivel personal, he aprendido riendo y llorando, etc; en definitiva he aprendido tanto que me he dado cuenta que ponerse uno mismo por encima de muchas cosas no es ser egoísta sino tener amor propio. En este tiempo he aprendido a darlo todo, a arriesgar y no quedarme con la duda, he sabido vivir el aquí y ahora, he sabido también que es que algo sea mutuo y dejar ir cuando no se siente lo mismo, y es que ha sido tanto que me llevo un gran regalo muy buenos amigos que siempre están hay para todo. He aprendido a dejar cosas por no seguir haciendome daño y de

Tantas cicatrices que algunas hasta con puntos de sutura llevan el nombre, el perfume, el recuerdo del sonido de una risa, el sabor del último beso, llevan a un punto de no retorno ya vivido. Tanto vivido que piensas que arriesgaste tanto que aún así piensas que deberías haberlo hecho más. Un día piensas que nunca diste tu mejor versión pero aun así sabes que hiciste todo lo que estuvo en tu mano para alcanzar la meta. Tantos pasos en falso para hacerte daño. Tantas cicatrices que ninguna tirita es capaz de tapar. Tantos puntos de sutura que algunos escucen aún después de sanados. Después de tanto vivido y sufrido lo único que quieres es seguir viviendo, arriesgando y sobre todo vivir el momento el ahora y aquí sin dar vueltas a un pasado que nunca volverá, pero si pensando en un futuro donde los imposibles no existen pero si los posibles; y con la única idea de llegar a tus metas.

Noche fría. Noche lluviosa. Noche a media luz decidiendo entre ser o no oscura como el carbón. En mitad de ella se oye el eco de unos pasos. Pasos que  suenan a ganas de comerse el mundo, a trazos rotos de un folio por los daños y a un sin fin de emociones, pensamientos y sensaciones; que todo ello en su conjunto componen la sombra de alguien que anda entre las calles silenciosas de una ciudad cualquiera. Pero si te paras ves una figura, a contra luz, intentando captar el instante perfecto; si el mismo que te hará ver lo más bello de cada detalle que compone la ciudad que pisas. Y tras sus pasos solo oyes el silencio de la noche oscura.  Sólo lo que podrás ver en realidad es una persona intentando encontrar el momento perfecto en el que fundirse con la compañía de uno mismo.  Esa que todo el mundo anhela pero que nadie es capaz de pelear por ella.  Entonces comprenderás que hasta la noche más cerrada es el momento idóneo para hacer una coleccion perfecta en la que grabar cada experienc