Rincón de los sueños

Dentro de ti se oye un pequeño click.  Detrás viene un huracán de sentimientos, culpabilidad y pensamientos.  Sin un orden tu cabeza empieza a cuestionar todo y derrepente te quedas en blanco; luego en negro y después en diferido sin saber que camino coger.  No te das cuenta que tu alrededor ve una versión tuya y que puedes hacer daño con ella o simplemente alejarles. Solo ves una versión distorsionada de quien eres y cuando ves en que te has convertido entiendes que quizás es el momento de pegar un giro a tu vida.  Quizás no somos conscientes de todo el caos que llevamos por dentro, las cadenas que arrastramos o el peso que nos echamos a la espalda.  Cuando alguien te tienda su mano y te diga todo lo bueno, y malo óyela pues solo quiere que explotes al máximo tu mejor versión.

Después de tanto te dejé de llorar. Ya no dolías.  Ya no hacías falta. Ya no eras nada en mi mundo sólo una estación más; solo otra parte de mi historia; solo otro recuerdo lleno de buenos momentos. Por qué eso eras un instante de felicidad en una falsa realidad. En ese instante en que tu mano rozo mi cara al poner el mechón de pelo detrás de mi oreja. En ese primer beso. En ese instante en el que el brillo de nuestros ojos se reflejaba la sonrisa del otro. Después de mil mensajes todo fue tan efímero que como vino se fue. Porque después de tantas falsas promesas, de besos sin fondo y de días esperando oir el zumbido de tus mensajes; esta historia terminó en game over. Tal vez, solo tal vez, algún día la puerta ya no estará entre abierta para repetir aquellos días en los que éramos los amantes perfectos; sino que ahí será cuando entre nosotros solo exista la palabra amistad. Aún valoraré lo que un día hiciste por hacerme sonreír y por regalarme los mejores momentos de tu felicidad. Sol

A veces eres el joker de la baraja otras la reina de corazones.  Depende del día eres  la reina más rica y otras necesitas una copa de más.  Otros simplemente no das abasto o te dan demasiados palos.  Piensa antes si quieres que sea tu reina o tu ruina.

Viaje con billete destino tu piel. Despegue recorriendo cada lunar de tu espalda. Aterrizaje en tus labios con tus manos sosteniendo mi cara. Turismo por cada una de tus cicatrices las cuales cuentan que eres un luchador. Visito tus brazos un lugar cálido en invierno y en verano el apoyo en una noche en la playa. Decido quedarme en estancia sin fecha de vuelta. En este viaje encuentro a una persona compuesta por parches, por sonrisas y lágrimas. Alguien que decidió luchar por seguir sus metas y alcanzar sus sueños. Alguien con miedos pero también con ganas de comerse el mundo. En este viaje tengo delante a una persona que, aún con miedo, pide que te quedes que no te vayas. Una persona de meterle triples a la vida y decirla qué está en este mundo para gritar su libertad que no quiere que nadie le detenga. Que tímidamente detrás de un te quiero o de un tengo ganas de verte se esconde un por favor no te vayas nunca de esta lugar. En este viaje decido recorrer las tiritas que

Eres esa casualidad que apareció un día llena de intenciones. Eres ese mensaje que arregla un mal día. Eres esa inesperada visita a cualquier hora con el fin de verme sonreír. Eres esa fuga para llevar chuches y hacer más golosa la espera. Eres ese momento en el que coges la mano y me siento segur@. Eres ese beso que no me espero. Eres ese abrazo que aparece de la nada por detrás. Eres esos momentos en los que nos duele la tripa de tanto reír. Eres esa casualidad que llegó un día sin planearlo llena de intenciones. Eres la superación constante por conseguir tus metas. Eres ese caos lleno de orden buscando un viaje con destino desconocido. Eres esa cena acompañada de un buen vino.

Soy la mujer de mi vida esa que pelea contra el monstruo del armario a las cuatro de la mañana en una noche de tormenta. Mujer soñadora, luchadora, amante de las causas perdidas. Esa que cada día lo vive como si fuera un sueño continuo.  La misma que cada día empieza con un café amargo para poder ver la parte dulce de las cosas que están por llegar.  La que habla sin miedo y va con la cabeza; y el cuerpo por delante.  La que pelea por conseguir sus metas.  La que se quiere todos los días un poquito más que el anterior. Esa que sabe irse en silencio más pulcro de cualquier lugar.

Un viaje en tren es acordarse de conversaciones hasta las tantas, de pensar la de veces que arriesgaste y a postaste sin miedo por algo, de los pequeños pasitos que das para salir de la zona de confort. Es apreciar tu alrededor y los pequeños detalles. Es soñar. Es viajar. Es dejarse llevar entre las páginas de un libro, entre los acordes de una guitarra de tu canción favorita.  Es esas ganas de llegar a casa o encontrarte con alguien de nuevo.  Es dormir cuando vas y vienes después de un día duro en la oficina o en el Instituto.

El cielo arde y bajo él, un mundo que se consume lentamente por la sin razón de una sociedad corrompida. El cielo arde y muestra su cara más cálida después de un mal día en la oficina.  El cielo arde y a penas lo logro ver. Miras arriba y ves que el sol se esconde, entre las nubes, porque le da miedo decir a luna lo bonita que está cuando brilla en la noche más fría. El cielo arde y a mi memoria, vagamente, llegan pequeños retrazos de aquellas últimas tardes de verano antes de volver al colegio.  El cielo no arde solo avisa que este verano, tan raro, termina y da paso a los tonos cálidos del otoño; y al crujir de las hojas tras tus pasos. El cielo arde por que ya no te verá tirado tomando el sol; ahora te verá jugando a saltar los charcos.  Y al mirar al cielo pienso en que punto de mi camino estoy para alcanzar la luna.

Aquella noche con las calles de Madrid bajo nuestros pies descubrí  una parte de él que jamás llegué a imaginar que la conocería. Recordé velozmente como nos conocimos y empezamos hablar de aquella forma tan particular.  Aquel día entendí lo que unos meses antes me dijo que le sacaba una sonrisa después de un día malo. Tal vez sin el saberlo me sacaba una sonrisa con cualquier tonteria y que conocerle era tener suerte de compartir con alguien como él el tiempo.  Aprendí a ir a por todo, a ver las cosas de otra manera y sobre todo a disfrutar de los pequeños detalles.  Pensar que todo empezó con sacar parecidos y terminamos por cajas xl de chuches con piques por videollamada. Que aunque no nos veíamos sacabamos unos minutos para hablar y que luego siempte que se podía se hacía cualquier plan con tal de disfrtuar de la compañía.  Aquella noche con una copa de vino, nuestras risas, las vistas de la Cibeles y la buena compañía me di cuenta de la suerte que tenía al compartir mi tiempo con

Mi lugar.  Mi refugio. El sitio donde conecto conmigo mism@.  Ese lugar en que respirar y relajarte hace ver el mundo de otra forma.  Donde escaparme de mis demonios es más fácil. El mismo que me recuerda que si una vez fui feliz; ahora lo soy más mereciendo el doble que aquella vez.  Ese pequeño lugar que me transporta a aquella maravillosa etapa de mi vida en la que un raspón en mi rodilla era mi mayor problema.  Todos tenemos ese lugar al que huir cuando nos hacemos pequeños dentro de nuestro propio infierno. 

Las cosas sencillas son aquellas capaces de sacarnos de nuestro mundo un ratito y son las mismas que nos hacen ver el tipo de personas que tenemos a nuestro alrededor.  Son esos momentos que compartes con tu entorno desde una merienda a un viaje.  Es esa colección de saltos al vacío cuando decides arriesgarte y tras el resultado aprendes algo nuevo.  Son esas simples cosas como un que tal, escribe cuando llegues o el simple hecho de invertir tu tiempo en mandar un mensaje o en quedar con esa persona aunque sean 5 minutos solo. Es todo aquello que nos rodea y nos hace darnos cuentas que nuestras decisiones a veces, solo, no son más que un parche a un problema aún sin resolver; los cuales poco a poco se apilan como la ropa en una silla.  Se aprecian cuando entiendes que el mundo con esas sencillas cosas es un lugar mejor.

Y yo me pregunto ¿Qué sabrá Neruda?.  Si en venite poemas se desesperó y encontró el amor.  Si de veinte formas dijo te quiero y rozó el cielo en cada palabra.  Si de una sola forma expresó su desesperación por lo que sentía tan adentro. Pero sin embargo como capitán naufragó entre sus versos y rimas.

Simplemente, a veces, solo a veces al mirar al cielo con los ojos cerrados sientes ese torbellino de emociones y sensaciones con la caricia del suave viento en una tarde de verano.  Sientes alegría por donde has llegado, tristeza por lo que has perdido, dolor por aquellas cosas que sientes que podían ser de otra forma y no lo son, nostalgia por el olor a piscina, en fin...tantas y pocas cosas que al final solo sientes vacio; estando tan llena de buena energía.  Te emocionas al recordar aquellos días en los que un "en 5 minutos estoy y vamos para ahí" te arreglaban un mal día. O de aquellas veces en las que invertiste tiempo en amigos con tal de verlos aunque fueran 5 minutos solo. O simplemente cuando hasta te emocionas al saber que un amig@ ha logrado su meta o cuando ves su mensaje con un ¿que tal estás? Cosas tan simples que se te pasan por tu cabeza y las vives con un vendaval de sensaciones que al final se te queda la sola idea de que te sientes orgulloso de tener amigos

Esa frase que resume el todo y la nada sobre el tiempo que tienes en cada capítulo de tu vida.  Esa palabra que dice que vivas el momento que no pienses en el mañana sólo en el hoy.  Tal vez, solo tal vez, es esa pequeña fracción de segundo en la que te das cuenta que tu alrededor es cambiante; es heterogéneo. Es esa máxima que siempre aparece cuando piensas en todo lo que has vivido y sabes que hay cosas que aún todavía te arrepientes de no haber exprimido más. Es ese viaje, esa locura, esa sonrisa después de una caída, es.... esa manera que tiene el tiempo de decirte que todo evoluciona que lo que hoy es mañana no y viceversa; esa simple manera que hay para saber que arriesgarse a veces es la única opción para vivir más.

A veces la vida es una montaña rusa. Otras simplemente te sobrepasa. En alguna ocasión sientes como por más que luchas aún hay heridas que duelen. Cicatrizan pero no suturan los puntos que das en cada una. En cada paso, cada según o en cada aliento que das siempre recuerdas aquellos días en los que sonreír era la mejor medicina. Solo sientes en cada día el pesar de las paredes que te recuerdan de forma constante que nada volverá a ser como antes. Tiritas que intentan hacer de dique para que no se desborde toda la oscuridad que llevas dentro; y otras simplemente se camuflan para expulsar la luz que llevas contigo. 

Me siento a ver la tele y la voz de mi abuela de fondo; pienso que será una de sus tantas batallitas pero en está ocasión algo llamó mi atención. Ella decía que esto parecía como cuando era pequeña y estaba la guerra que tenían miedo de que algo cayera.  Desde su visión piensa que la mano dura es necesaria, que se ha perdido el aprecio a los pequeños detalles y que por mucho que estés encerrado tu cabeza es tu peor enemigo. Siguió y siguió con su pequeño discruso, mientras veía la tele, entre medias del mismo soltaba alguna de las suyas tipo "ya están hablando de esta como todas las tardes". Llegó un punto que las mañanas empezaron a ser noches y noches que parecían mañanas; días en los que ese pequeño intervalo llamado tarde pasó a ser el toque de queda para aplaudir a aquellos que estaban en primera línea combatiendo a un virus; como si se tratara de soldados en una trinchera tirando granadas a campo enemigo. Y así una semana, y otra hasta llegar casi al mes.  Y ella, mi ab

Son sólo instantes. Una gota cae y otra lucha por no naufragar en un charco.  Son el antes y el después de un beso bajo un paraguas. Es la sonrisa y el miedo a la oscuridad. Es el anhelo de un quizá o un tal vez por miedo al arriesgar. Es...la lluvia que al caer construye un camino sin muros mientras tu te pones barreras.

Desde mi venta observo como el mundo parado vuelve a su ser; vuelve a girar limpio y em silencio solo escuchando de fondo esa canción que cada día a las 19:58 suenan los aplausos. Como cada uno desde su casa hace mil malabares para llevar en soledad o en compañía este encierro tan necesario.  Al mirar ves todo más bonito, con más color pero sin embargo sientes ese vacio en el que necesitas oír las risas de los niños en el parque de abajo. Ojalá solo sean unas semanas más y que en nada todos podamos volver a esa rutina tan criticada antes de todo este caos.  Por que ahora hay un nuevo verbo el yo me quedo en casa, el tú te quedas en casa, él/ella se queda en casa, nosotros nos quedamos en casa, el vosotros os quedáis en casa y ell@s se quedan en casa. Hagamos de el la mejor lección que de esto todos juntos y unidos podemos vencer; y que con cada granito de arena que aportemos hacemos del mundo un lugar mejor.

Él era de poner bloqueos y candados a cada trocito de si mismo. Ella era de buscar los vacíos legales y disfrutar del aquí, y ahora. Ambos luchaban él por que nadie le hiriera más daño y ella por encontrar el camino para llegar a contar los lunares de su espalda uno a uno.

Amistad esa palabra tan compleja que en su sencilla esencia significa ser alguien en la vida de otra persona en la cual sumas. Amistad es una palabra tan heterogénea y homogénea que su solo signifcado la hace especial. Es una palabra llena de confianza y seguridad, de apoyo y saber estar. Es ese pequeño super poder que hace ver que se es capaz de cualquier cosa por un amigo@ con tal de verle con una sonrisa. Es una palabra que va acompañada siempre de la palabra paciencia esa que te permite ver en esa persona llamada amigo que hasta sus tonterías son poco cuando lo que te suma es su compañía, y los buenos momentos.

Subo el primer escalón el corazón a mil y las primeras gotas caen. Subo el segundo escalón un fuego en mi interior me dice que es el momento, que es el aquí y ahora. En los siguientes escalones encuentro dudas, miedos y esfuerzo.  Llega el día en que pongo el primer pie en el suelo y me doy cuenta que es mi momento, que voy por el buen camino, que cada día estoy más cerca de mi meta.  Me late el corazón, el sudor recorre mi cuerpo y un fuego interior me dice que siga luchando. Solo se que llegado el día en conseguir mi meta encontraré la paz en las muestras de agradecimiento de la gente y seré más humano de lo que hubiera podido llegar a ser antes. 

Ante el todo y la nada, la adversidad o felicidad siempre supe que debía brillar aunque el mismo sol me hiciera sombra.  Supe que a veces hay que regarse, como una flor, para crecer y buscar esa ansiada libertad.  No siempre todo es en la misma tonalidad siempre habrá un color que destaque por encima de otros; y ese deberás ser tú aunque lo hagas como cual ninja. Para llegar a lo más alto debes ir paso a paso e importante es hacer una pausa de reflexión para ver donde estás,lo que dejas atrás y lo que te queda por recorrer para llegar a ese sueño inalcanzable. No existen imposibles solo posibles pero para ello necesitas creertelo como un muñeco de nieve intentando sobrevivir en el más fogoso verano.  Así sucesivamente día tras día te vas dando cuenta de lo dura que es la vida y de lo ecléctico que uno se vuelve cada vez que pasa una página de su historia, aun por terminar.

A veces tus pasos pueden ser la prisión en la cual decides si seguir en ella o cambiar el rumbo de tu camino buscando la forma de escapar del carcelero pensamientos. Te encuentras a veces tan cuadriculado en una sociedas en la que es más importante aparentar que ser. Das pasos y lo único que encuentras a tu alrededor es gente que no valora los pequeños detalles, las pequeñas palabras que llegan tan adentro que te hacen ser alguien grande y otras simplemente te sientes solo rodeado de gente. Nunca somos capaces de pararnos a pensar que los sentimientos fluctuan y lo que un día no es otro día si puede ser; o la manera de no entender que es mejor quedarse con el lado positivo de las cosas en vez de forzar situaciones que hacen añicos lo poco que le queda a tu sin sentido.

Poesía es tu manera tan tuya de hacerme sonreír. Es el regalarme tiempo sin pedirlo. Es tu forma de sorprender, de vivir aventuras y hacer mil planes. Poesía es todo aquello que hace la vida un poco más bonita y más fácil.

Arriesgando disfrutas la vida un poco más, le pones emoción y adrenalina. Es otra forma de no quedarte con la duda del que hubiera pasado. Las mejores historias llevan la frase arriesge y gane; gané tanto que terminó por sanar cada rotura de mi yo interior descubriendo mi mejor versión. Tras esa palabra descubrí un mundo lleno de aventuras, de recuerdos, de risas y lágrimas; pero sobre todo un mundo sin miedo al intentar las cosas.  Me precipite al vacío y planeando llegue al suelo con pie firme. 

Una estación es el lugar donde dos bocas se unen, donde los gritos de los niños pequeños son de felicidad, donde se ven los amores fugaces, donde empieza y termina el viaje que te hará cambiar,... Una estación es ese lugar tan ecléctico y nostálgico que a todos nos lleva al momento preciso en el que una sonrisa no era forzada, donde los te quiero son sinceros y donde las miradas esconden mil historias. Una estación es esa metáfora del en cada parada se suben y bajan personas que en tu vida ocuparon o lo van hacer un lugar tal vez para siempre